El grafeno es de los materiales más modernos que se pueden usar. Puede parecer uno de los materiales de última generación, que en parte lo es. Pero no es tan nuevo como se cree. Se conoce este material desde hace medio siglo cuando su enlace químico y su estructura se describieron durante la década de 1930, pero no se le dio mucha atención porque se consideraba un material inestable. Sólo adoptó su nombre oficial en 1994 gracias a que los científicos Gueim y Novosiólov consiguieron aislarlo a temperatura ambiente. Lo cual les otorgó el Premio Nobel de Física en 2010.
Pero… ¿Qué es el grafeno?
El grafeno es una sustancia formada de carbono puro. Se obtiene del grafito y su estructura es un tanto peculiar dado que sus partículas se agrupan de forma hexagonal y en dos dimensiones formando láminas tan finas como un átomo, no como la mayoría de materiales.
Lo más sorprendente de este material son sus cualidades y usos.
Es el material más duro y resistente conocido superando al diamante. Es muy rígido lo cual le permite soportar grandes fuerzas sin deformarse a la vez de ser altamente flexible, elástico, transparente y ligero con una densidad de 0’77 miligramos por metro cuadrado.
Sus propiedades lo hacen el material ideal para componentes integrados por su alta conductividad térmica y eléctrica que permite el paso más rápido de electrones y un menor calentamiento del material lo cual se atribuye a un menor nivel de consumo de electricidad que podrá ayudar a mejorar el medio ambiente al sustituir otros materiales contaminantes que también permitirá conexiones más rápidas. Pero no lo eso, ya que el grafeno es capaz de generar electricidad a través de energía solar lo cual lo hace un material muy prometedor para el campo de energías limpias.
También posee una gran capacidad de almacenamiento energético que podrá dar baterías más duración en menos tiempo de carga. El grafeno se podrá utilizar para elaborar cables de alta velocidad, super-baterías eléctricas, pantallas táctiles flexibles, cámaras fotográficas mil veces más flexibles...etc.
Entre otras propiedades también destaca que se auto-repara al romperse una celda hexagonal genera un agujero que atrae átomos de carbono para taparlo. O cuando el grafeno está en forma óxida puede absorber residuos radiactivos y que hace reacciones químicas con otras sustancias que produce compuestos de diferentes propiedades.
Todas éstas cualidades dotan al grafeno de gran potencial de desarrollo.